El ejercicio tiene numerosos beneficios para la salud que van más allá de beneficiar al cuerpo físico y también puede brindar beneficios mentales y emocionales. Un estilo de vida sedentario puede aumentar el riesgo de depresión y puede aumentar el riesgo de muchas enfermedades crónicas. Hacer algo de ejercicio puede ser lo último que tenga ganas de hacer cuando está deprimido, pero puede ayudar con su depresión y otros indicadores de salud.

A continuación se ofrecen algunas sugerencias prácticas para motivarse a hacer ejercicio cuando está deprimido .

Disfruta tu ejercicio

A veces, el ejercicio se ve como una carga u otra cosa que tienes que soportar. Sin embargo, el ejercicio debe ser agradable y hacer algo que te guste aumentará naturalmente tu deseo de hacerlo. Piense en ello menos como “ejercicio” y más como “movimiento” si eso ayuda. Si ir a un gimnasio parece poco realista o lo último que quieres hacer, busca otras formas de ponerte en movimiento .

Por ejemplo: caminar al aire libre, andar en bicicleta, jugar fútbol, ​​voleibol, dodgeball o sóftbol en una liga comunitaria, bailar, caminar, nadar, etc. Cambiar su rutina también la mantendrá interesante y no la hará aburrida y predecible. .

Hacer ejercicio al aire libre

Estar en la naturaleza es terapéutico para muchas personas y puede ser más estimulante. Cuanto más natural sea el entorno, mejor cuando sea posible. Si sale el sol, aprovéchelo y pase tiempo al aire libre mientras hace ejercicio. La luz solar es una fuente natural de vitamina D que puede tener una ventaja sobre los niveles de depresión.

Los investigadores ahora están descubriendo que la vitamina D puede tener un papel en la salud mental, y todavía se está estudiando el efecto de la vitamina D y la depresión. Algunas investigaciones sugieren niveles bajos de vitamina D en sangre y depresión.

Escucha mientras te mueves

Centrarse en otra cosa además del ejercicio puede ayudarlo a moverse. Escuchar un libro en cinta mientras camina o hace ejercicio puede ayudarlo a aumentar la motivación para ponerse en marcha. Esto también puede aumentar el placer que obtiene del ejercicio y puede mantenerlo activo. Trate de elegir una historia de acción o aventura; ¡es posible que desee hacer más ejercicio de lo anticipado para escuchar más de la historia!

Escuchar música también puede hacer que el ejercicio sea más divertido. Concéntrese en escuchar el tipo de música o historia que escucha solo cuando hace ejercicio. Si le gusta la radio hablada, esta también podría ser una salida agradable para trasladarse y solo escucharla cuando esté en movimiento.

Entrena con un amigo

Tener algo de responsabilidad y camaradería en el ejercicio puede ser de gran ayuda y motivar a cualquiera. Relacionarse con alguien a través de una rutina de ejercicios que les guste a ambos puede aumentar la emoción y el disfrute del ejercicio. También pueden responsabilizarse mutuamente, y será más difícil perderse una sesión de entrenamiento si sabe que alguien más cuenta con usted para estar allí. Si no tiene a nadie con quien hacer ejercicio, piense en unirse a un equipo o una clase grupal.

Tener un destino

Hacer ejercicio con un propósito puede matar dos pájaros de un tiro y puede ahorrar tiempo. Si tiene que hacer algunos mandados locales, piense en caminar o andar en bicicleta para hacerlos. Esto le dará más significado a su tiempo de ejercicio y no podrá dejar de hacerlo a la mitad porque va de un punto a otro.

¿Reunirse con un amigo? Encuentre un punto a mitad de camino y reúnase allí. Si está demasiado lejos para que pueda caminar o andar en bicicleta todo el camino, estacione su automóvil en algún lugar intermedio para que aún pueda hacer algo de ejercicio.

Ayude a alguien más a través de su ejercicio

Una forma tangible de ayudar con la depresión es dejar de concentrarse y ayudar a otra persona. Hay muchos programas en marcha que emparejan a adultos con niños para realizar actividades beneficiosas juntos. Por ejemplo, podría ser el hermano o hermana mayor de un niño y hacer actividades divertidas juntos.

Podría recaudar dinero para una organización benéfica para una carrera en el futuro. Esto te motivará para entrenar si lo haces por una causa para ayudar a otras personas y te hará sentir bien haciéndolo.

Conclusión

Los beneficios del ejercicio se extienden a ayudar a alguien a combatir la depresión. Disfrutar del ejercicio es una gran estrategia, ya que debe estar ansioso por hacer algo que ama sin temer algo que sabe que tiene que hacer. Moverse más puede ayudar a darle placer a su cerebro si disfruta lo que está haciendo.

Hacer ejercicio al aire libre no solo es estimulante, sino que también puede aumentar los niveles de vitamina D, lo que puede tener un impacto en la depresión. Escuchar música, grabar un libro o hablar por radio cuando está en movimiento puede ser una buena motivación y ayudarlo a disfrutar de su entrenamiento.

Hacer ejercicio con un amigo puede dar más motivación y responsabilidad, así como planificar un destino al que ir para hacer ejercicio, como la oficina de correos, reunirse con un amigo para tomar un café, ir al supermercado, etc. Cambiar el enfoque para beneficiar a otra persona para el ejercicio también puede ayudar ; entrene para una carrera que recaude fondos para una organización benéfica o sea activo con alguien que necesite un mentor.