La alimentación consciente es una habilidad y, como cualquier otra habilidad, debes practicarla para mejorar y disfrutar de sus beneficios. En términos simples, la alimentación consciente se refiere a la forma en que aborda la comida; ¿Come por hábito (o porque tiene que hacerlo) o considera cada comida como una experiencia alegre?

Come con tu mente y no con tu estómago

Cuando está comiendo y al mismo tiempo haciendo otras cosas, por ejemplo, trabajar o mirar televisión, tiende a comer grandes cantidades. Por otro lado, si intentas no hacer nada más que saborear y disfrutar cada bocado, entonces comprenderás mejor lo que comes y sobre todo cuánta comida consumes.

Cualquier dieta o programa de pérdida de peso debe incluir información no solo de lo que debe comer, sino también de cómo, y déjeme explicarle a continuación por qué esto es importante.

Comer no es un trabajo sino una experiencia

Con el ritmo rápido y estresante del estilo de vida moderno, comer se ha convertido en un trabajo que debe hacerse rápidamente como todos los demás. Muchas veces simplemente tomamos algo para comer sin perder el tiempo porque tenemos que pescar algo más que consideramos importante.

Los almuerzos de trabajo se han convertido en una rutina. Comemos en la oficina mientras trabajamos o mientras conducimos para ahorrar tiempo. A veces incluso usamos el almuerzo o la cena como excusa para reunirnos con alguien cuando en realidad estamos allí por negocios.

Comer rápido y combinar la alimentación con otras actividades no solo se observa en adultos. Lo mismo está pasando ahora con nuestros hijos que siguen el ejemplo y nuestro ritmo frenético. La mayoría de las familias comen mientras ven la televisión. Se ha vuelto muy raro comer y concentrarse solo en la comida y disfrutarla sin hacer nada más.

¿Cuáles son las consecuencias de esta situación?

Los estudios han demostrado que existe una comunicación bidireccional entre el cerebro y el sistema digestivo y esto se relaciona con la forma en que comemos.

Si durante la comida, el cerebro tiene que lidiar simultáneamente con otras cosas, entonces el proceso de digestión es menos efectivo en alrededor del 30% al 40%. El resultado son trastornos digestivos al producir más gases en el tracto digestivo, hinchazón y malestar en el intestino.

Aparte del exceso de gases y la hinchazón, las principales consecuencias negativas son comer en exceso, el aumento de peso y la obesidad.

Cuando comemos, el cerebro recibe señales del sistema digestivo sobre las cantidades consumidas. Cuando nuestras necesidades alimentarias están casi completas, las señales del cerebro “nos dicen” que dejemos de comer.

Este mecanismo no funciona correctamente si hacemos otras cosas mientras comemos. El cerebro no percibe el sentido del gusto, la satisfacción y la plenitud como debería porque está ocupado con otros procesos u otras cosas que hacemos durante nuestra comida.

El resultado es que el cerebro no señala el “final” y el resultado es comer en exceso. Comer en exceso resultará gradualmente en un aumento de peso y si esto continúa durante mucho tiempo a la obesidad.

Además de este comportamiento, no debemos olvidar que el estrés , el mal humor, la falta de sueño también afectan (negativamente) las señales que envía el cerebro con respecto al consumo de alimentos.

¿Cuáles son los beneficios de la alimentación consciente?

La clave es tener cuidado cuando comemos y no hacer otras cosas, sino concentrarse en comer conscientemente. Al hacerlo, disfrutaremos de una serie de beneficios que incluyen:

Comer menos

Mejor digestión

Disfruta más de nuestra comida

Satisfacernos con menos comida

Necesitamos hacer nuestro mejor esfuerzo para evitar tener que hacer otras cosas, o dejar que nuestra mente vuele en muchos otros pensamientos y problemas, pero para concentrarnos en masticar y tragar y los placeres que ofrecen los sabores y olores de lo que comemos.

La alimentación consciente puede mejorar su experiencia alimentaria

Cuando coma, evite hacer otras cosas. Concéntrese en la comida, disfrute de la rica experiencia e intente eliminar cualquier otro pensamiento o reflejo.

Comer despacio

Mastica mejor y dale a cada bocado la atención que se merece

Comer sin mirar televisión, leer periódicos o navegar por la red.

Asegúrese de estar sentado y no de pie cuando coma, preferiblemente en un ambiente pacífico y silencioso.

Ponga ‘cantidades regulares’ de comida en su plato e intente comer en no menos de veinte minutos

Si somos diestros, comemos con la izquierda y si usted es zurdo, comemos con la derecha, esto ralentizará el ritmo.

Cualquier intento de prevenir la sobrealimentación, el aumento excesivo de peso y la obesidad, así como cualquier dieta para adelgazar debe ir acompañada de detalles no solo de lo que comemos, sino también de la forma correcta de consumir nuestra comida. ¡Dominar el arte de la alimentación consciente te ayudará a disfrutar más y perder más!